miércoles, 6 de julio de 2011

Capítulo 46

Detecto en seguida el portátil de Zack en el baño, enchufado a la corriente. Como si oliera la conexión wifi en el ambiente me conecto internet en nanosegundos. Instantes después descubro a Airin conectada, le ametrallo a preguntas en el chat que responde como puede. Llega un momento en el que le dejo hablar y me explica que está esperando a Mpi, sin pensármelo demasiado, les mando una petición de video conferencia.
Me tumbo en la cama para no perder detalle de sus detalles, Mpi no puede parar de apartarse el flequillo cada 20 segundos y Airin es una obsesa del movimiento del piercing de su labio inferior. Jamás pensé que echaría de menos tantas chorradas. En cualquier caso, una barata conexión de hotel que apenas lleva la imagen y el sonido compaginados no me deja disfrutar al máximo de lo que más extraño. La cam no hace justicia a la perfecta sonrisa de Mpi, ni a los preciosos ojos de Airin, pero es lo que hay.
Mientras hablamos me doy cuenta de que hace casi medio año que no las había visto. Me olvido del teclado, gracias al avance tecnológico, nuestras voces son las líderes de la conversación.
-Dios mío, como os echo de menos. –Suelto de repente, cortando el hilo conversacional y anudando uno nuevo mucho más emotivo.
-¡Y nosotras!- suelta Airin.
-¿Cuándo piensas pasarte a vernos?- pregunta Mpi con cara de pena.
-Por favor, Mpi ¡qué preguntas!- interviene Airin- entre Zack, su papi, Jake… ¡no creo que quiera volver!
-¡Pues claro que quiero! Pero aún no sé… no estoy segura de muchas cosas…
-No importa, siempre nos puedes invitar, apuesto a que en tu casa hay sitio suficiente.
Por supuesto, Airin nunca desaprovecha una oportunidad de viajar.
-Puedo hablarlo con papá…
-Pues ¿a qué esperas?
Sin darnos tiempo a acabar con un tema, comienzo enseguida con otro, no porque intente evitar el anterior, sino porque con ellas los pensamientos me van mucho más rápido de lo normal, soy suprahumana con estas chicas.
-Tías, ¿sabéis qué?- Ni siquiera espero a que respondan y les explico con detalle todo lo que ha pasado hace escasos momentos con Zack, incluyendo todos los detalles. Al finalizar, ambas se miran con las cejas levantadas y se echan a reír.
-¡Madre mía, Melanie..!- Mpi ni siquiera puede acabar la frase.
-Jajajajaja, déjala que aproveche… Por cierto, Melanie, ¿qué tal está Jack y compañía?
-Muertos, creo…- Me fulmina con la mirada, a través de la cam aún puedo seguir sintiendo la enorme paciencia que tiene que tener conmigo, me echo a reír y antes de poder contestarle llaman a la puerta.
-Un momento, chicas.
-¡Ok!
Aparto el ligerísimo portátil de encima de mí y me encamino a la puerta, con el simple pensamiento de responder: “está en el ensayo”. Pero, para mi sorpresa, no me encuentro con un buscador de Zack. Allí aparece el gran Halvo.
-Hola…
-Hola, Melanie.- Me responde con una gran sonrisa, sonrisa que, de hecho, asusta.
-¿Quieres algo?
-Pues… a ti, me manda Zack.
Y sigue con esa sonrisa de violador. Abro un poco más la puerta para que pase.
-Dame cinco minutos.
Me dirijo al rincón dónde había depositado mi bolsa y saco mi camiseta de conciertos, me la pongo por encima del bikini, no me he percatado hasta el momento, pero Halvo inspecciona la habitación hasta toparse con el ordenador en el que, por supuesto, seguía en marcha la videoconferencia.
-Wooooo…- Y, como si estuviera en su puñetera casa, se arrodilla en el suelo, de cara al ordenador.- Hey.
-¡Hello!- Oigo que responde en seguida Airin.
-Where are you from girls?
-Spain!
-Melanie is from Spain too. Are you her friends?
-We are like sisters!
-I see, I see
El chico parece sentirse a gusto con la conversación y lo demuestra acomodándose en la cama con el ordenador, le miro con incredulidad y me devuelve una carcajada divertida. Me encojo de hombros y me siento a su lado para vigilar que nadie me robe a mis amigas.
El cuarteto video conferenciante acaba descojonándose durante minutos, Halvo se pone tenso de repente y me mira arrepentido, me grita una disculpa, a mí y a las chicas del ordenador, anuncia una despedida. Partimos.
Llegamos tarde, ese hecho es como un rito para mí, pero algo me dice que no para Halvo.
-Espero que Zack no se moleste…- dice mirándome, esperando una disculpa antes del juicio final.
-No, tranquilo- intento interpretar el papel de Dios de le mejor manera posible.
Entramos en la sala, al parecer, el ensayo de All Time Low ya ha pasado, We the Kings están sobre el escenario. Todo el mundo parece tener una tarea concreta que realizar. Localizo a Jacob, está con Evan en el puesto de sonido. El susodicho bajista no tarda en localizarnos.
-¡Por fin! ¿Qué ha pasado?- nos pregunta.
-Mucho tráfico.
-Nos perdimos.- Halvo y yo hablamos a la vez, le miro confusa, maldigo no haber planeado mejor la excusa.
-Nos perdimos porque había mucho tráfico.- Intenta salir del apuro Eric.
-Sí…- corroboro- Halvo pensaba que conocía un atasco, ha sido una aventura…
Zack acaba riendo.
-Vamos, anda. -Zack pasa un brazo por mi hombro.