El resto del vuelo transcurre tranquilo, llegamos cuando la noche posa con todo su esplendor, los chicos se han dormido prácticamente en la misma posición, les hago una foto antes de que Adrienne rompa el encanto y los despierte. Es la primera foto que tengo de ellos, después de cuatro meses en USA. La mayoría de las fotos de estas vacaciones son de Jacob con sus padres en el parque de agua, Joseph y yo apenas hicimos fotos de nuestras salidas.
Oh sweet home California! Las vacaciones no me han dado todo lo que esperaba de ellas, pero aún así, le agradezco a Hawaii el haberme dado la oportunidad de conocer más a Joseph y unirme más a Jacob.
Sale el sol, me siento la cama, me pongo mis zapatillas, me levanto, ando hasta el baño, cierro la puerta, me desnudo, entro en la ducha, salgo, me visto, y bajo a desayunar, todo normal en un día corriente hasta que entro en la cocina. Allí están Billie y Adrienne charlando tranquilamente ¿sigue pareciendo normal, verdad? Pero justo al verme pasar por su lado se silencian con las miradas. Si pasas al lado de dos personas y se callan solo puede significar dos cosas a mi entender: te están criticando, están criticando a alguien que conoces.
-¿Qué ocurre?- Pregunto con miedo. Ellos se miran y, ante la falta de iniciativa de mi padre, Adrienne se levanta y coge un sobre de la encimera, uno muy grande, uno de color marrón, uno que susurra mi nombre.
-Melanie, esto es tuyo.
Efectivamente, lleva mi nombre en una etiqueta pegada al dorso junto con el símbolo de California.
-¿Qué es?-Pregunto.
Como si fuera a averiguarlo más rápidamente que ellos formulando esa pregunta.
-Ábrelo.- Me anima Billie con una sonrisa de oreja a oreja.
Despego el papel lentamente, rasgándolo con cuidado por la solapa. Ahí vamos. Creo saber de qué se trata antes de sacar el primer folio: son los resultados de la prueba de admisión a la universidad. Trago aire antes de aguantar la respiración en el proceso en el que tardo en sacar los folios del sobre. Cierro los ojos, respiro, los abro… Apta.
-He aprobado…- susurro aliviada.
Ellos parecen aliviarse también. Mi padre me aprieta el hombro con su mano, orgulloso, creo. Sonrío.
-Enhorabuena, Melanie.- Salta una voz desde detrás de la encimera. ¿Cuánto tiempo lleva ahí?
-Gracias Josh, buenos días a ti también.
-Por cierto, papá, he decidido que voy a aprobar matemáticas.
Aquella conversación que todos tuvimos con papá una noche vuelve de nuevo a mi mente, Billie le prometió un bonito premio si aprobaba la asignatura que tiene clavada en el alma.
-Luego hablamos.- Corta Billie.
No me entretengo más allí, ni siquiera desayuno, como era el propósito principal de la mañana, subo directamente a la habitación de Jacob y entro directamente. Me sorprende verlo tumbado en la cama, despierto y mirando el techo pensativo, resulta raro en Jake.
-¡He aprobado!
-¡Enhorabuena, Mel! Lo sabía.
-¿Ocurre algo, Jake?
-Mmm no… nada grave por el momento.- Entro y cierro la puerta.- Hoy parece que va a ser uno de esos días en los que apetece llorar.
Mi hermano mira por la ventana, es cierto, está nublado y eso, en California, puede ser motivo de llanto para muchos pero creo que Jacob se siente mal por un motivo diferente.
-¿Aún le das vueltas a lo de Hawaii?
-No, la cagué, punto. Pero… jo, Mel… te lo tengo que preguntar o no me sentiré bien.
-Claro, dime.
-Y sé sincera, porfa.
-Siempre, Jake.
-Verás, no consigo acordarme muy bien de… bueno, de la noche… pero creo que en algún momento hablamos ¿no?
-Sí.
-¿Qué te dije?
-Pues…- finjo que estoy recordando para intentar decidir qué debería decirle, si me pregunta esto tan preocupado solo puede ser por un motivo: no quería decirme lo que me dijo- me pediste que te llevara a España, creo.
Por una parte, me siento mal por mentirle (mejor dicho, por ocultarle información), pero pienso que en el fondo se sentirá mejor así, si decide contarme algo, que sea por propia voluntad y no por la de una mala noche.
-¿Te lo pedí… por algún motivo… o algo?
-Mmm no… surgió sin más.- Intento que mi voz suene lo más desinteresada posible.- ¿Te preocupa haber dicho algo malo?
-Sí, la verdad es que sí, bastante, no fue mi mejor noche.
-Solo me dijiste eso y que el camarero tenía pinta de asalta cunas.
Ambos nos reímos, puedo ver a Jacob más relajado.
-De todos modos, Jake, puedes contarme lo que quieras.
-Tú también lo sabes ¿no? Porque a veces pienso que no soy lo suficiente bueno para guardar tu secreto…
-¿Se trata de un intercambio? ¿Es eso?- Pregunto algo molesta, no con Jake, si no con la situación, a mi me encantaría poder contárselo pero su forma de verme podría cambiar totalmente, lo que me da que pensar ¿y si fuera eso lo que le ocurre a él también?
-No… pero me estás pidiendo que confíe en ti, cuando tú no confías en mí…
-Jacob Amrstrong que te quede bien claro, eres la única persona aquí a quien le confiaría mi vida, no a Zack, no a papá y tampoco a Josh ¿de acuerdo?
Parece sorprenderle, me mira con cara de ¿indignación?
-¿Entonces?
-Dame tiempo…
-Claro. Lo mismo te digo.
Parecemos idiotas, ambos queremos soltarlo pero lo único que hacemos es pedirnos tiempo, a veces me gustaría que me atosigara un poco, que la preocupación o la simple curiosidad pudiera con sus principios morales, pero sé que Jacob no es así y lo sé porque yo soy jodidamente parecida.
Algo aparece para cortarnos el mal rollo, Joseph entra sin permiso en la habitación.
-Hola, hermano- pasea su vista por el cuarto entero para comprobar si debe saludar a alguien más y allí estoy yo- hola, persona- siempre tan agradable- tengo noticias.
-Y nosotros cerebro… fuera de mi cuarto, Josh, nadie te ha invitado.
-Pero que borde eres cuando quieres, Jake.
Estoy tentada de responder “como tú” pero eso me delataría de nuevo, apoyando el bando de Jacob así que prefiero quedarme callada.
-Es una noticia que os interesa.
-No nos…
-Déjale hablar, Jake- Sí he apoyado a Joseph y no me ha pagado, espero que merezca la pena.
-Dentro de poco… en casa… ¡habrá un nuevo miembro!
-Oh no… Que alguien avise a protección de animales, Josh quiere una mascota.- Bromea su hermano.
-Un perro, probablemente.- Sonríe Josh orgulloso.
-Lo tienes muy claro- intervengo- ¿vas a aprobar seguro?
-Sí, solo necesitaba motivación, no era esto lo que más quería pero he pensado que es un buen regalo ¿qué opináis? A papá le parece bien y mamá me ha dicho que con tal de que no entre el bicho en casa…
-Te deja entrar a ti y no deja entrar al perro, no veo la diferencia.
-Oh, Jake, crece, esa broma ha sido muy barata.
-Josh.- Digo cambiando de tema, no he tenido oportunidad de hablar con él desde nuestra discusión, quizá este sea un buen momento- ¿Crees que se debería hablar lo que pasó en Hawaii?
Nótese el efecto de la impersonalidad en la oración, espero haberla compuesto bien.
-Está todo bien, Mel, no problem.
-¿Qué pasó?- por supuesto, el rey cotilla ha de hacer su trabajo.
-Joseph se enfadó conmigo…
-Yo no me enfadé, solo me molesté.
-¡Wooh la nueva no-hermana ha conseguido algo que yo no he conseguido en 12 años de vida!
-Iros a la mierda.
Josh sale de la habitación riéndose por el comentario de Jacob. Creo que debería hablar con él, hay ciertas cosas que puedo dejar pasar sin más, pero no esto.
-Ahora vengo.
No consigo nada, Joseph sigue insistiendo en que no quiere hablar del tema, peor para él si quiere guardarse esos sentimientos, sería la primera vez que Josh no dice algo en voz alta.
En su cuarto parece nervioso, como si no le gustase que yo estuviese ahí. Sinceramente yo tampoco me encuentro muy cómoda rodeada de tanta pornografía, hard punk y oscuridad. Quizás debería salir ya.
-Oye, Mel, lo que voy a hacer ahora… va a molestarte… va a molestarte mucho…
Me impresiona su frase… abro mucho los ojos y miro a mi alrededor, asustada, llamadlo paranoia…
-¿Cómo sabes que va a molestarme?
Él no responde atraviesa su habitación y abre el último cajón de su mesita de noche. Revuelve las cosas y saca un sobre. Joseph mira el sobre, el sobre mira a Joseph y finalmente ambos me miran a mí. Me lo extiende.
-Llegó antes de que nos fuéramos a Hawaii y Adrienne lo dejó un tu escritorio…
El pequeño sobre tiene mi nombre escrito a mano con letra angulosa y pequeña pero legible e increíblemente bonita, y pienso así porque sé quién ha escrito mi nombre de esa manera…
-¿Por qué me lo quitaste?- Pregunto triste, acariciando las letras de mi nombre con los pulgares.
Josh no responde. El sobre está abierto, lo que significa que ahí está la respuesta, lo que significa que todo lo vivido con Joseph no ha significado una mierda si luego no respeta nada.
-Eres el ser más egoísta que he conocido nunca.
Oh sweet home California! Las vacaciones no me han dado todo lo que esperaba de ellas, pero aún así, le agradezco a Hawaii el haberme dado la oportunidad de conocer más a Joseph y unirme más a Jacob.
Sale el sol, me siento la cama, me pongo mis zapatillas, me levanto, ando hasta el baño, cierro la puerta, me desnudo, entro en la ducha, salgo, me visto, y bajo a desayunar, todo normal en un día corriente hasta que entro en la cocina. Allí están Billie y Adrienne charlando tranquilamente ¿sigue pareciendo normal, verdad? Pero justo al verme pasar por su lado se silencian con las miradas. Si pasas al lado de dos personas y se callan solo puede significar dos cosas a mi entender: te están criticando, están criticando a alguien que conoces.
-¿Qué ocurre?- Pregunto con miedo. Ellos se miran y, ante la falta de iniciativa de mi padre, Adrienne se levanta y coge un sobre de la encimera, uno muy grande, uno de color marrón, uno que susurra mi nombre.
-Melanie, esto es tuyo.
Efectivamente, lleva mi nombre en una etiqueta pegada al dorso junto con el símbolo de California.
-¿Qué es?-Pregunto.
Como si fuera a averiguarlo más rápidamente que ellos formulando esa pregunta.
-Ábrelo.- Me anima Billie con una sonrisa de oreja a oreja.
Despego el papel lentamente, rasgándolo con cuidado por la solapa. Ahí vamos. Creo saber de qué se trata antes de sacar el primer folio: son los resultados de la prueba de admisión a la universidad. Trago aire antes de aguantar la respiración en el proceso en el que tardo en sacar los folios del sobre. Cierro los ojos, respiro, los abro… Apta.
-He aprobado…- susurro aliviada.
Ellos parecen aliviarse también. Mi padre me aprieta el hombro con su mano, orgulloso, creo. Sonrío.
-Enhorabuena, Melanie.- Salta una voz desde detrás de la encimera. ¿Cuánto tiempo lleva ahí?
-Gracias Josh, buenos días a ti también.
-Por cierto, papá, he decidido que voy a aprobar matemáticas.
Aquella conversación que todos tuvimos con papá una noche vuelve de nuevo a mi mente, Billie le prometió un bonito premio si aprobaba la asignatura que tiene clavada en el alma.
-Luego hablamos.- Corta Billie.
No me entretengo más allí, ni siquiera desayuno, como era el propósito principal de la mañana, subo directamente a la habitación de Jacob y entro directamente. Me sorprende verlo tumbado en la cama, despierto y mirando el techo pensativo, resulta raro en Jake.
-¡He aprobado!
-¡Enhorabuena, Mel! Lo sabía.
-¿Ocurre algo, Jake?
-Mmm no… nada grave por el momento.- Entro y cierro la puerta.- Hoy parece que va a ser uno de esos días en los que apetece llorar.
Mi hermano mira por la ventana, es cierto, está nublado y eso, en California, puede ser motivo de llanto para muchos pero creo que Jacob se siente mal por un motivo diferente.
-¿Aún le das vueltas a lo de Hawaii?
-No, la cagué, punto. Pero… jo, Mel… te lo tengo que preguntar o no me sentiré bien.
-Claro, dime.
-Y sé sincera, porfa.
-Siempre, Jake.
-Verás, no consigo acordarme muy bien de… bueno, de la noche… pero creo que en algún momento hablamos ¿no?
-Sí.
-¿Qué te dije?
-Pues…- finjo que estoy recordando para intentar decidir qué debería decirle, si me pregunta esto tan preocupado solo puede ser por un motivo: no quería decirme lo que me dijo- me pediste que te llevara a España, creo.
Por una parte, me siento mal por mentirle (mejor dicho, por ocultarle información), pero pienso que en el fondo se sentirá mejor así, si decide contarme algo, que sea por propia voluntad y no por la de una mala noche.
-¿Te lo pedí… por algún motivo… o algo?
-Mmm no… surgió sin más.- Intento que mi voz suene lo más desinteresada posible.- ¿Te preocupa haber dicho algo malo?
-Sí, la verdad es que sí, bastante, no fue mi mejor noche.
-Solo me dijiste eso y que el camarero tenía pinta de asalta cunas.
Ambos nos reímos, puedo ver a Jacob más relajado.
-De todos modos, Jake, puedes contarme lo que quieras.
-Tú también lo sabes ¿no? Porque a veces pienso que no soy lo suficiente bueno para guardar tu secreto…
-¿Se trata de un intercambio? ¿Es eso?- Pregunto algo molesta, no con Jake, si no con la situación, a mi me encantaría poder contárselo pero su forma de verme podría cambiar totalmente, lo que me da que pensar ¿y si fuera eso lo que le ocurre a él también?
-No… pero me estás pidiendo que confíe en ti, cuando tú no confías en mí…
-Jacob Amrstrong que te quede bien claro, eres la única persona aquí a quien le confiaría mi vida, no a Zack, no a papá y tampoco a Josh ¿de acuerdo?
Parece sorprenderle, me mira con cara de ¿indignación?
-¿Entonces?
-Dame tiempo…
-Claro. Lo mismo te digo.
Parecemos idiotas, ambos queremos soltarlo pero lo único que hacemos es pedirnos tiempo, a veces me gustaría que me atosigara un poco, que la preocupación o la simple curiosidad pudiera con sus principios morales, pero sé que Jacob no es así y lo sé porque yo soy jodidamente parecida.
Algo aparece para cortarnos el mal rollo, Joseph entra sin permiso en la habitación.
-Hola, hermano- pasea su vista por el cuarto entero para comprobar si debe saludar a alguien más y allí estoy yo- hola, persona- siempre tan agradable- tengo noticias.
-Y nosotros cerebro… fuera de mi cuarto, Josh, nadie te ha invitado.
-Pero que borde eres cuando quieres, Jake.
Estoy tentada de responder “como tú” pero eso me delataría de nuevo, apoyando el bando de Jacob así que prefiero quedarme callada.
-Es una noticia que os interesa.
-No nos…
-Déjale hablar, Jake- Sí he apoyado a Joseph y no me ha pagado, espero que merezca la pena.
-Dentro de poco… en casa… ¡habrá un nuevo miembro!
-Oh no… Que alguien avise a protección de animales, Josh quiere una mascota.- Bromea su hermano.
-Un perro, probablemente.- Sonríe Josh orgulloso.
-Lo tienes muy claro- intervengo- ¿vas a aprobar seguro?
-Sí, solo necesitaba motivación, no era esto lo que más quería pero he pensado que es un buen regalo ¿qué opináis? A papá le parece bien y mamá me ha dicho que con tal de que no entre el bicho en casa…
-Te deja entrar a ti y no deja entrar al perro, no veo la diferencia.
-Oh, Jake, crece, esa broma ha sido muy barata.
-Josh.- Digo cambiando de tema, no he tenido oportunidad de hablar con él desde nuestra discusión, quizá este sea un buen momento- ¿Crees que se debería hablar lo que pasó en Hawaii?
Nótese el efecto de la impersonalidad en la oración, espero haberla compuesto bien.
-Está todo bien, Mel, no problem.
-¿Qué pasó?- por supuesto, el rey cotilla ha de hacer su trabajo.
-Joseph se enfadó conmigo…
-Yo no me enfadé, solo me molesté.
-¡Wooh la nueva no-hermana ha conseguido algo que yo no he conseguido en 12 años de vida!
-Iros a la mierda.
Josh sale de la habitación riéndose por el comentario de Jacob. Creo que debería hablar con él, hay ciertas cosas que puedo dejar pasar sin más, pero no esto.
-Ahora vengo.
No consigo nada, Joseph sigue insistiendo en que no quiere hablar del tema, peor para él si quiere guardarse esos sentimientos, sería la primera vez que Josh no dice algo en voz alta.
En su cuarto parece nervioso, como si no le gustase que yo estuviese ahí. Sinceramente yo tampoco me encuentro muy cómoda rodeada de tanta pornografía, hard punk y oscuridad. Quizás debería salir ya.
-Oye, Mel, lo que voy a hacer ahora… va a molestarte… va a molestarte mucho…
Me impresiona su frase… abro mucho los ojos y miro a mi alrededor, asustada, llamadlo paranoia…
-¿Cómo sabes que va a molestarme?
Él no responde atraviesa su habitación y abre el último cajón de su mesita de noche. Revuelve las cosas y saca un sobre. Joseph mira el sobre, el sobre mira a Joseph y finalmente ambos me miran a mí. Me lo extiende.
-Llegó antes de que nos fuéramos a Hawaii y Adrienne lo dejó un tu escritorio…
El pequeño sobre tiene mi nombre escrito a mano con letra angulosa y pequeña pero legible e increíblemente bonita, y pienso así porque sé quién ha escrito mi nombre de esa manera…
-¿Por qué me lo quitaste?- Pregunto triste, acariciando las letras de mi nombre con los pulgares.
Josh no responde. El sobre está abierto, lo que significa que ahí está la respuesta, lo que significa que todo lo vivido con Joseph no ha significado una mierda si luego no respeta nada.
-Eres el ser más egoísta que he conocido nunca.
Oh, dios vuelvo a odiarte infinito!!!
ResponderEliminarno queria k acabara (sniff sniff)
y aun menos si cuando acaba te quedas como si faltara parte de la historia! (mala...¬¬)
tiaaa lo mejor lo de la unii, k tenia yo en el momento toda la tension, y solucionado!!! :)
Ameno a lo de que Jake y mel se parecen, tanto que deberian darse un guantazo mutuo a veces, en plan relax ^^
lo bueno de todo lo malo es que da para mucho; y cada vez conozco mejor a los personajes
no tardes en el 41 ehh!! :)
Luv ya!!
Bueno baby, despues de años sin subir (y que lo subas justo ahora ¬¬) tengo que decir que...
ResponderEliminarSiii, echaba de menos comentarte >.<
Vale, pasemos al capi.
Te puedes creer que no me acordaba de lo de Josh? Madre miia, que mala fan soy Y.Y (que conste que te acabo de dar la excusa por el tuenti) Me alegro de lo de la uni y eso (aunque ya lo sabia porque en algun momento me lo dijiste) Me matad e intriga lo del sobre, no he visto la letra de Zack (creo que si pero no me acuerdo) pero le pega la letra angulosa e increiblemente bonita... aunque es zurdo asi que... no se yo... aunque Lucia es zurda y tiene letra bonita... no se XD
Vale... dejo de delirar xD Mmm.. ah! si! Yo tambien creoq ue un dia nublado en california deprimiria a cualquiera, a mi la primera Y.Y
Mmmm... acabo diciendo que...
No subas el proximo hasta el 10 de Febrero!!!
XD
P.D. (se que esto es más de tí)
ResponderEliminarQue comentario mas largo me ha quedado! xD Habia algo más pero lo he olvidado xD